TENDENCIAS: “Vivimos en una Época de Fanatismos que a Veces Usan la Brevedad para su Conveniencia”
September 27, 2024

En entrevista con Antoni Gutiérrez-Rubí, asesor de comunicación y consultor político, se reflexiona sobre la importancia de saber parar para pensar, defiende la diferencia abismal entre lo corto y lo breve… Invita a “desacelerarnos para lograr llegar al alma de las ideas”, y afirma que “la brevedad es un ejercicio de introspección y de respeto hacia el otro”. Encontrar las palabras adecuadas sucede cuando puedes estar en silencio y empatizar con el otro; el problema es que hoy en día es difícil detenerse y encontrar, en la velocidad, el tiempo para hallar las palabras adecuadas.
Fuente: Ethic
Blog Colegio Altos Estudios de Quirama

Ofrecer una aproximación sistémica e integral a la IA y a las nuevas tecnologías asociadas. Que el participante se forme una idea objetiva, desprovista de mitos, miedos y sesgos, sobre la revolución digital: sus principios, potencialidades, riesgos y dilemas. Y que visualice el papel del liderazgo en el curso que la IA tome a futuro.

El mundo en que vivimos (la tierra y la sociedad humana) fue construido como resultado de decisiones tomadas, tanto por dirigentes como por todos nosotros, dentro de una dinámica compleja de interacciones, que ocurren dentro del sistema social y cultural. Hay una multicausalidad en la complejidad, en la cual sobresale el papel de los dirigentes (llamados líderes) quienes, con sus decisiones, tienen el poder de inspirar direcciones y caminos a sus grupos de influencia. Dicha capacidad, principalmente de forma inconsciente, si es alimentada de forma constante por los intereses individuales, denominados intereses egóicos (por nuestra natural tentación narcisista), se convierte en lo que denominamos poder externo. Este tipo de poder tiende a no ver, o a desconocer, las necesidades propias del bien general (o del bien común), así como a ser ciego frente a nuestra realidad plurirrelacional, que incluye las necesidades propias de la vida. Cuando nosotros padecemos de este tipo de ceguera (culturalmente alimentada), podemos decir que estamos en el campo del antiliderazgo. La dinámica contraria es la dinámica propia del liderazgo auténtico, que obedece a una consciencia, en la cual nos hemos dado cuenta de que el poder personal solo es útil cuando se pone al servicio de los demás, y de todo lo demás. Este poder es el poder auténtico que surge solo cuando nos encontramos en un estado de armonía interior. Y es un tipo de poder que, por su influencia positiva, está repercutiendo en el mundo en forma de cocreación evolutiva continua; y que, cuando lo encarnamos, manifiesto en valores, nos convierte en auténticos líderes, haciendo una gran diferencia en el mundo. Para avanzar en ese proceso de cultivo interior, y por consiguiente de crecer en nuestro liderazgo, los libros que hoy reseñamos nos ayudan a abrir los ojos y ver de forma nueva. El desarrollo organizacional y social se da en la medida en que crezcamos en consciencia y nos cultivemos interiormente. La salida es hacia dentro.

Según Arbib y Seba, no hay duda. La convergencia tecnológica está precipitando un cambio radical en nuestro sistema productivo (modelo económico) y en nuestro sistema de organización social (contrato social). Sería esta la tendencia más promisoria en siglos. Así lo consignan en su último libro (Stellar, marzo de 2025): “Por primera vez en la historia de la civilización humana, hay una alternativa superior a la extracción. Están surgiendo tecnologías extraordinarias con el potencial de transformar radicalmente todo el sistema de producción”.

“Cada año, la evasión en Colombia equivale al 8 % del PIB, cerca de 130 billones”, es decir, unas 6 reformas tributarias. “El 40 % de las personas que hacen parte del 0,01 % con más riqueza del país admitió haber evadido impuestos” “El más reciente informe de Oxfam sobre desigualdad, publicado en enero de 2025, revela que los multimillonarios colombianos pagan proporcionalmente menos impuestos que los más pobres”.

“…miles de jóvenes están diciendo ‘no, gracias’ a las carreras tradicionales de más de cinco años, y prefieren caminos más ágiles, personalizados y alineados con los desafíos del mundo laboral. En respuesta, las universidades están reformando sus programas, acortando duraciones, ofreciendo microcredenciales, flexibilizando rutas de ingreso y promoviendo la interdisciplinariedad”.

