EL ÁGORA: Medio Planeta
February 7, 2025

Así le da título a su último libro Edward O. Wilson, autoridad mundial de la biodiversidad. Esta última palabra es quizás una de las más nombradas en los últimos meses, y mucho más en nuestro país, con ocasión de la COP16 en Cali, pero ¿realmente tenemos claridad de lo que significa la potencial pérdida de secuencias genéticas que han tomado millones de años en llegar hasta nuestros tiempos?
Los científicos ―biólogos y conservacionistas― que luchan por los dos millones de especies conocidas y las ―estiman― seis millones sin conocer que habitan, con nuestra especie, este único planeta que conocemos y tenemos, plantean que, para finales del siglo XXI, el daño será irreversible, de no tomar medidas extremas hoy.
En este ensayo, E.O. Wilson cuestiona vehementemente la postura del Antropoceno frente a la conservación moderna, que prioriza de manera mecanicista los usos posibles y potenciales de la naturaleza, y que pretende reorganizar lo que queda de ella para servir a la gente, en lugar de protegerla en su forma original, prístina.
La propuesta contiene, en sí, el poder de lo simple: dejar medio planeta a la naturaleza y permitir la supervivencia de la mayoría de las formas conocidas – y no conocidas - de vida. De lo contrario, este planeta no será más que una nave espacial, dirigida por humanos, viajando por el universo hacia su extinción total.
En mi paso por la COP16, tuve la sensación de estar asistiendo a un “bazar de negocios” de la vida, había de todo: oferentes de servicios ambientales, compradores necesitados de limpiar sus huellas de carbono, intermediarios técnicos, financiadores, comunidades reclamando sus derechos a participar, entidades públicas y privadas dictando sentencia, al final, comerciantes (con notables excepciones) de lo que se ha denominado green washing.
Nuestra postura arrogante, tan propia del Antropoceno, nos hace creer dueños de la naturaleza, con derecho a decidir y transar sobre ella, delimitarla como jardines, museos vivos o bancos de recursos para generación de ingresos. Es justo lo contrario, somos sus administradores, no sus propietarios, nos recuerda E.O. Wilson.
Somos naturaleza, todos sentimos que esta expresión lo dice todo y la abrazamos como una verdad absoluta. Este nuevo paradigma y esta nueva humanidad que emerge, en la que nos revelamos cada día en el Colegio de Altos Estudios Quirama, deberá asumir un rol protagónico para la defensa de los últimos bastiones de la naturaleza. ¿Qué estamos dispuestos a hacer?
El texto citado nos ofrece una extensa lista de lugares en el mundo que deberán conservarse tal cual están, por el futuro de la humanidad. Por razones de espacio, citaré aquí solo tres que tenemos en Colombia: cuenca amazónica, Chocó biogeográfico, bosques andinos de niebla y páramos.
De conservarse, estos lugares serán sitios de admiración y peregrinación; pero, en esencia, con su existencia, serán la única posibilidad de la estabilización del medio ambiente global y quizás la única oportunidad para la humanidad.
PD: otros títulos del mismo autor:
- La conquista social de la tierra
- El sentido de la existencia humana
Alejandro Henao Pérez
Director General
Mane Colombia & Región Andina
Blog Colegio Altos Estudios de Quirama

Ofrecer una aproximación sistémica e integral a la IA y a las nuevas tecnologías asociadas. Que el participante se forme una idea objetiva, desprovista de mitos, miedos y sesgos, sobre la revolución digital: sus principios, potencialidades, riesgos y dilemas. Y que visualice el papel del liderazgo en el curso que la IA tome a futuro.

El mundo en que vivimos (la tierra y la sociedad humana) fue construido como resultado de decisiones tomadas, tanto por dirigentes como por todos nosotros, dentro de una dinámica compleja de interacciones, que ocurren dentro del sistema social y cultural. Hay una multicausalidad en la complejidad, en la cual sobresale el papel de los dirigentes (llamados líderes) quienes, con sus decisiones, tienen el poder de inspirar direcciones y caminos a sus grupos de influencia. Dicha capacidad, principalmente de forma inconsciente, si es alimentada de forma constante por los intereses individuales, denominados intereses egóicos (por nuestra natural tentación narcisista), se convierte en lo que denominamos poder externo. Este tipo de poder tiende a no ver, o a desconocer, las necesidades propias del bien general (o del bien común), así como a ser ciego frente a nuestra realidad plurirrelacional, que incluye las necesidades propias de la vida. Cuando nosotros padecemos de este tipo de ceguera (culturalmente alimentada), podemos decir que estamos en el campo del antiliderazgo. La dinámica contraria es la dinámica propia del liderazgo auténtico, que obedece a una consciencia, en la cual nos hemos dado cuenta de que el poder personal solo es útil cuando se pone al servicio de los demás, y de todo lo demás. Este poder es el poder auténtico que surge solo cuando nos encontramos en un estado de armonía interior. Y es un tipo de poder que, por su influencia positiva, está repercutiendo en el mundo en forma de cocreación evolutiva continua; y que, cuando lo encarnamos, manifiesto en valores, nos convierte en auténticos líderes, haciendo una gran diferencia en el mundo. Para avanzar en ese proceso de cultivo interior, y por consiguiente de crecer en nuestro liderazgo, los libros que hoy reseñamos nos ayudan a abrir los ojos y ver de forma nueva. El desarrollo organizacional y social se da en la medida en que crezcamos en consciencia y nos cultivemos interiormente. La salida es hacia dentro.

Según Arbib y Seba, no hay duda. La convergencia tecnológica está precipitando un cambio radical en nuestro sistema productivo (modelo económico) y en nuestro sistema de organización social (contrato social). Sería esta la tendencia más promisoria en siglos. Así lo consignan en su último libro (Stellar, marzo de 2025): “Por primera vez en la historia de la civilización humana, hay una alternativa superior a la extracción. Están surgiendo tecnologías extraordinarias con el potencial de transformar radicalmente todo el sistema de producción”.

“Cada año, la evasión en Colombia equivale al 8 % del PIB, cerca de 130 billones”, es decir, unas 6 reformas tributarias. “El 40 % de las personas que hacen parte del 0,01 % con más riqueza del país admitió haber evadido impuestos” “El más reciente informe de Oxfam sobre desigualdad, publicado en enero de 2025, revela que los multimillonarios colombianos pagan proporcionalmente menos impuestos que los más pobres”.

“…miles de jóvenes están diciendo ‘no, gracias’ a las carreras tradicionales de más de cinco años, y prefieren caminos más ágiles, personalizados y alineados con los desafíos del mundo laboral. En respuesta, las universidades están reformando sus programas, acortando duraciones, ofreciendo microcredenciales, flexibilizando rutas de ingreso y promoviendo la interdisciplinariedad”.

